Para “no estar sujetos al chantaje de Rusia” sirve como herramienta la ‘excepción ibérica’, ha defendido Nadia Calviño, ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital.
Así lo ha manifestado en su intervención en la reunión de la Comisión de Economía y Seguridad de la 68ª Sesión Anual de la Asamblea Parlamentaria de la OTAN.
Una especie de ‘minicumbre’ de la Alianza que se celebra en Madrid. En ella, la ministra ha reivindicado que el mecanismo ibérico “debería extenderse al conjunto de la UE” con el fin de, “cuanto antes, dejar atrás el problema de la inflación”.
Además, se ha felicitado porque España no tiene la dependencia de la energía rusa como sí sucede con Alemania e Italia.
Esa ‘independencia’ se debe a la “diversificación a lo largo de años” de los suministros a España. También, a la “importante penetración de las energías renovables”.
“Esto nos permite afrontar con mayor fortaleza el chantaje de Putin”, reiteró. Asimismo, Calviño ha subrayado que la economía española avanza, pese al “indudable momento de altísima incertidumbre”.
Una situación generada por los dos años de pandemia y, ahora la guerra en Ucrania. Un conflicto que provoca una “mayor volatilidad y shock en los mercados energéticos”, además de una “ralentización del crecimiento económico”.
En cambio, “la La economía española sigue presentando fuerte crecimiento, aumento de empleo y, afortunadamente, hemos empezado ya a contener la inflación”. Algo en lo que ha sido decisiva la ‘excepción ibérica’.
De este modo, detalló que la previsión del Gobierno se sostenía en el crecimiento este año del 4,4%. Sin embargo, “a la luz de los datos del tercer trimestre” y la buena marcha de octubre y noviembre, lo previsto “se ha quedado corto”.
En ese sentido, destacó que “todos los organismos internacionales están revisando al alza las previsiones de crecimiento de la economía española”.
“Se debe a la extraordinaria evolución del mercado de trabajo”, explicó, para subrayar el “enorme interés por parte de grandes multinacionales para invertir en España”.
Así, resaltó la diferencia de actuación respecto a anteriores crisis y celebró el programa Next Generation EU.
Un plan que, a su entender, “marca un antes y después en la respuesta a crisis económicas en Europa”. Asimismo, “marca un antes y un después en la economía española”.
Dicho esto, avisó de que se necesita “una mayor autonomía estratégica y mayor seguridad desde el punto de vista energético, alimentario, tecnológico, industrial y digital”.