El PSOE propone derogar los acuerdos con la Santa Sede

Lo hará en aquellos casos en que no sean compatibles con la Constitución.
Así lo ha manifestado José Manuel Rodríguez Uribes, secretario de Laicidad del PSOE, durante el ciclo Derechos Humanos, Memoria y Laicidad que organizó el Aula Socialista de Cultura de la Agrupación del PSOE de Almería. “Cuarenta años después de la Constitución y de los acuerdos debemos de darle una vuelta a ese tema para que no haya efectos en la legislación ordinaria que trunquen una voluntad de avanzar y profundizar en un Estado laico, que es el mandato de la Constitución”. En este ciclo en el que colaboran los grupos de investigación Sur Clio y Estudios del Tiempo Presente de la Universidad de Almería y la Fundación Unicaja, Uribes afirmó que los socialistas denunciarán, cuando gobiernen a nivel nacional, “las dimensiones de los acuerdos con la Santa Sede que no son compatibles con la Constitución”, destacando que “una de las barreras, uno de los obstáculos actuales, es que alguno de los contenidos de ese acuerdo son contrarios al espíritu de laicidad”.
En esa línea, señaló que un Estado laico “no persigue a las personas creyentes ni persigue las confesiones religiosas, sino que sitúa en su justo sitio las creencias religiosas y las reglas comunes públicas, que deben de estar separadas”, aplicando, así, la idea romana de al César lo que es del César, y a Dios lo que es de Dios”. Ante los medios, razonó que son muchas las implicaciones del concepto de laicidad y que se debe concretar en propuestas, dentro de la labor llevada a cabo por el área de Libertades Públicas del PSOE, que incluye “repensar la vigente Ley de Libertad Religiosa, que consideramos que en el siglo XXI debe de llamarse Ley de Libertad de Conciencia y de Convicciones y, por supuesto, tener cambios en el contenido”. A ello se unen otras iniciativas que afectan a la sociedad laica, entre ellas, la Proposición de Ley Orgánica de Regulación de la Eutanasia, así como la necesidad de “recuperar de alguna forma, lo antes posible, la asignatura de Educación para la Ciudadanía y los Derechos Humanos como una materia que sea transversal y que afecte a todos los estudiantes sin distinción ni segregación y que, por lo tanto, ayude a formarles en los valores de la laicidad, de la democracia”, explicó.