Con un 30,5% de intención de voto, mantiene casi diez puntos de distancia sobre el PP.
Ayer se hizo público el barómetro de septiembre del Centro de Investigaciones Sociológicas, CIS, en el que queda reflejado que el PSOE mantiene su liderazgo con un 30,5% en intención de voto. A casi diez puntos de distancia, el PP avanza cuatro décimas, hasta situarse en el 20,8%, mientras que Ciudadanos desciende a la tercera posición, con un 19,6%, y Unidos Podemos y sus confluencias, en cuarto lugar, con un 16,1%.
Desde esa cómoda primera posición el PSOE sería el virtual ganador de unas elecciones, caso de celebrarse hoy. No baja del umbral del 30% y sus rivales directos no avanzan. Tal es así, que los populares no han aprovechado el efecto Casado, ya que no hay cambios a consecuencia de la renovación interna del partido.
El anterior barómetro, publicado a principios de agosto, revelaba las consecuencias de la llegada de Pedro Sánchez a la presidencia del Gobierno. El PSOE subió, entonces, ocho puntos respecto al anterior barómetro, saltando de la tercera posición a la cabeza de la lista y con más de 10 puntos respecto a PP y Ciudadanos, que empataban en un 20,4% de intención de voto. Unidos Podemos, cayó en esa consulta a un 15,6%, y ahora recupera levemente.
Ya se habían cumplido los primeros 100 días de Gobierno socialista cuando se llevó a cabo este sondeo, entre el 1 y el 11 de septiembre. En cambio, cabe destacar que la encuesta no refleja el efecto que haya podido provocar la polémica por la tesis doctoral de Sánchez, aunque sí, poco, la dimisión de Carmen Montón, ex ministra de Sanidad.
Sí pueden haber influido en estos resultados que el Ejecutivo ya había acogido a los migrantes del buque Aquarius y el anuncio de la intención de exhumar los restos de Franco del Valle de los Caídos.
En lo referente al centroderecha, Albert Rivera se deja ocho décimas y cede la segunda plaza a Pablo Casado. No obstante, entre ellos no hay más que apenas un punto de diferencia, lo que refleja que el centro derecha está partido por la mitad. Por contra, en el centroizquierda el PSOE mantiene su supremacía frente a Podemos.
Ahora, entre socialistas y la formación morada suman un 46,6% de los votos, frente al 40,4% de populares y naranjas. en agosto la situación era del 45,5% y del 40,8%, respectivamente.
En cuanto a los líderes, Pedro Sánchez es el mejor valorado por los españoles, con un 4,11 sobre 10. Le sigue Albert Rivera, con el 3,93, Pablo Casado, 3,56, Alberto Garzón, 3,79, y Pablo Iglesias, 3,07, que repite en la última plaza. A pesar de esto, los ciudadanos califican la gestión socialista como regular en un 38,6% de los casos coma mala o muy mala en el 34,9%, mientras que un 14% la ve buena y tan sólo un 1,1%, muy buena.
las funciones de las diferentes formaciones políticas no se han hecho esperar, y Ciudadanos ha criticado el barómetro y le ha negado cualquier credibilidad, al estar el CIS presidido por el anterior responsable de Estudios y Programas del PSOE, Jose Felix Tezanos. José Manuel Villegas, secretario general de la formación naranja, ha criticado la encuesta y ha dicho de ella que está hecha “a medida” por el “gurú sociológico” de Pedro Sánchez. Ayer, el partido de Rivera registró una comparecencia urgente del responsable del CIS.
En sentido semejante se ha manifestado Dolors Montserrat, portavoz del PP, que considera que el CIS es un “organismo más de campaña del PSOE”. Los socialistas entienden, sin embargo, que los ciudadanos han valorado la acción del Gobierno por encima del “ruido”. Unidos Podemos exige, por su parte, que se pregunte por la valoración de la monarquía.
El PSOE es el partido con mayor intención de votos según las encuestas, pero que tenga muchísimo cuidado con la estrategia que va a llevar a cabo en relación con la situación en Cataluña. Si no se doblega ante los separatistas y sigue los dictados de las leyes y la Constitución, el PSOE podrá agotar la legislatura y ganar las nuevas elecciones, pero lo veo bastante difícil ya que tanto P.P como Cs el único objetivo que tienen es derribar al Gobierno de Pedro Sánchez, poniéndole cortapisas. Y de hecho ya se han unido para hacerlo.