Asegura que se han vulnerado o restringido todos los derechos constitucionales y ha reiterado su petición de libertad para sus defendidos.
Andreu van Den Eynde, abogado de Oriol Junqueras, ex vicepresidente de la Generalitat, y del exconsejero Raül Romeva, fue el primero en intervenir en el turno de cuestiones previas del juicio del procés que ayer arrancó en el Tribunal Supremo y comenzó diciendo que la causa es un “vodevil procesal” que “atenta contra la disidencia política”.
“Nos encontramos ante un juicio excepcional porque se han producido excepciones que afectan al núcleo duro de los derechos fundamentales”, dijo en el comienzo de su alegato. “Tengo que hablar de Derecho Penal democrático, no vamos a hacer una defensa política, sino a defender valores y Derechos Humanos”, señaló, en referencia a la sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos por el opositor prokurdo Demirtas, y a su entender “tiene que ver con el silenciamiento de la disidencia política y sobre cómo se puede utilizar la prisión provisional para afectar a la agenda política”.
El abogado puso en cuestión que se esté diciendo que el proceso no tiene una vertiente política porque en la primera resolución de Pablo Llarena, juez instructor, se decidió el ingreso en prisión de Carme Forcadell, ex presidente del Parlament, y en ella se hablaba de que no había una solución pacífica para el conflicto catalán. Quiso destacar que lo que se ha investigado es un “proyecto político”. “Es un vodevil procesal”, manifestó, subrayando que en el Juzgado de Instrucción número 13 Barcelona se instruye la organización del referéndum del 1 de octubre, que es la “causa madre”.
Fue este Juzgado el que incoó diligencias para que se investigaran unas declaraciones de Santiago Vidal, ex senador y magistrado suspendido, posteriormente ampliadas “sin justificación” a una querella de Vox por los delitos de rebelión y sedición. todo ello a pesar de que el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña aseguraba que no veía conductas penales. Es una “monitorización generalizada de toda la actividad política de los independentistas”, dijo el letrado.
A juicio de Van den Eynde se han vulnerado muchos derechos fundamentales, entre ellos el de expresión, reunión y manifestación, libertad ideológica, derechos políticos y el derecho a la deliberación y separación de poderes. “Si no se han violado todos los derechos fundamentales, se han restringido todos” los constitucionales, hizo hincapié. Incluso, dijo, se ha violado el derecho de libertad de culto porque Junqueras “no ha podido ir a misa”.
Una vez más pidió la puesta en libertad de sus defendidos y dijo no comprender que el ex vicepresidente catalán esté “en prisión más de un año, lejos de sus hijos, de sus defensas”, cuando siempre ha acudido a todas las citaciones judiciales, incluso cuando su otro defendido fue excarcelado por el propio juez Llarena durante la instrucción.