El Gobierno de la Nación, presidido por Mariano Rajoy, no intenta curar los males que afectan al país, sino que espera que se curen solos, se olviden, o, en el mejor de los casos, impone una cataplasma o un analgésico.
Necesitamos un gobierno, empero, que afronte a corto plazo la recuperación del poder adquisitivo de nuestros pensionistas. Que instale en ellos por ley, por norma y por circunstancia, la obligación de al menos incrementar las pensiones el valor del IPC (tal como venía sucediendo tras la reforma socialista de los 80 votada en contra por Alianza Popular).
Necesitamos un Gobierno de la Nación que afronte a medio plazo separar el futuro de los pensionistas de los vaivenes electorales, respetando el artículo 50 de la Constitución, instalando en la carta magna una reforma que blinde las pensiones y el carácter público de las mismas.
Necesitamos un gobierno que reforme a largo plazo las bases de la economía nacional, sustentando el crecimiento en la generación de empleo y el incremento de la productividad, fruto de inversiones en I+D.
Necesitamos un gobierno que afronte reformas, no que proponga parches.
Editorial “Parches o reforma”
