A primera hora de ayer, alrededor de doscientos migrantes de origen subsahariano asaltaron la doble valla de Melilla que separa la ciudad autónoma de Marruecos. De ellos, 59 lograron su objetivo de saltar el vallado.
En ese asalto a la valla de Melilla resultaron heridos tres guardias civiles y dos de los inmigrantes.
Un portavoz de la Delegación del Gobierno informó de que alrededor de las 5:15 horas, agentes del Instituto Armado se percataron de la presencia de un grupo numeroso de migrantes cerca de la verja. En concreto, por la zona del río Nano.
Acto seguido, las fuerzas de seguridad activaron el protocolo anti-intrusión. Se hizo tanto por agentes marroquíes, que “han colaborado activamente”, como en el lado español. Aquí se hizo “con patrullas territoriales, Grupos Rurales de Servicio (GRS) y el servicio de helicóptero”.
“Pese al dispositivo, sobre las 6:00 horas, se ha producido un salto por parte de más de 150 personas, logrando entrar a Melilla 59 migrantes”, reconoció un portavoz gubernamental. Como comentamos, tres agentes resultaron heridos, además de dos migrantes, “con pronóstico leve”.
Asimismo, se trasladó al centro covid de Altos del Real a los 59 migrantes que lograron entrar en territorio español. Allí se les realizaron pruebas diagnósticas de coronavirus y tendrán que guardar cuarentena.
El último asalto a la valla de Melilla se produjo en la noche del 18 al 19 de enero. En aquella ocasión, alrededor de 90 subsaharianos lograron pasar la frontera al aprovechar una zona de obras entre La Cañada y Pinares de Rostrogordo.
La avalancha de migrantes fue no violenta y se saldó con un solo herido, uno de los asaltantes que se hizo daño en la muñeca en una caída. Las fuerzas marroquíes consiguieron rechazar a una cincuentena de migrantes y la Guardia Civil a unos veinte más. Sin embargo, unos noventa lograron saltar la valla.