Se disparan los precios de los alimentos en el mundo

Se disparan los precios de los alimentos en el mundo

Los precios de los alimentos han alcanzado máximos de 9 meses y 7 años, según los estrategas de Rabobank, Michael Every y Michael Magdovitz. Así lo trasladan en el análisis Bíblico, flaco y malvado: sueños de un superprecio agroalimentario.

Los dos estrategas analizan comparativamente el pasaje bíblico en el que José, que era comerciante y planificador, evitó una hambruna en Egipto. Según la Biblia, José supo interpretar el sueño del Faraón por el cual, tras siete años de gran abundancia, llegaría la hambruna. Por tanto, debía asegurar el almacenamiento de grano suficiente para sobrevivir.

Así, “José orquestó el primer ciclo de productos agrícolas en el que la supervivencia estaba por encima de los beneficios. Hoy tenemos la tecnología de las semillas, la agricultura automatizada y los mercados globales. Sin embargo, seguimos teniendo años de vacas flacas y de vacas gordas por razones meteorológicas, logísticas, políticas y geopolíticas”, apuntan desde Rabobank.

La trayectoria de los precios de los alimentos es muy elevada, lo que demuestra que no ha habido previsión. Tampoco ha habido fortaleza o poder financiero para almacenar durante años de abundancia. No obstante, hay otros factores que afectan.

China está importando alimentos a gran escala

Estos expertos señalan que las existencias de los exportadores se han desplomado a mínimos de 7 años. A ello se une que China está importando a gran escala. Además es muy difícil incrementar con rapidez la oferta.

A su vez, no se pueden olvidar las adversas condiciones meteorológicas o que algunos países imponen el proteccionismo alimentario. Asimismo, hay que tener en cuenta que los costes logísticos suben, mientras se especula a futuros de materias primas.

Lo más preocupante es que algunos de estos factores o alguno de ellos contribuyan a subir los precios de los alimentos y las materias primas. Si fuera así, se incrementaría la inseguridad alimentaria, impactando a miles de millones de personas en el mundo. Sobre todo en África y el sur de Asia.

El riesgo mayor vendría con la pérdida de diez años, deshaciéndose los avances para reducir la inseguridad alimentaria y la mejora de la renta disponible. Tal es así que 42 países están ante una situación preocupante y 102 podrían estar peor que en 2011.

Por su lado, la Reserva Federal juega un rol extraño porque su pretensión es luchar contra la pobreza con la inflación. Además, un aumento sostenido de los precios de los alimentos podría encrespar el escenario geopolítico.

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