Dimas pide más de diez millones

Es la cifra que le ha ofrecido El Corte Inglés.
Dimas Gimeno, ex presidente y futuro ex consejero delegado de El Corte Inglés, no ha aceptado la oferta que le ha hecho la compañía para que dimita del Consejo de Administración y retire las demandas y querellas que presentó.
Mañana se celebra la junta de accionistas anual en la que se aprobara la salida de gimeno. Con su negativa se aleja la posibilidad de un acuerdo in extremis para llegar a ella «sin la preocupación de Dimas Gimeno».
Desde hace semanas se vienen reuniendo representantes del expresidente y de la compañía, y recientemente entre el propio Gimeno y Jesús Nuño de la Rosa, actual dirigente de El Corte Inglés. Estas reuniones se consideran normales antes de una junta de accionistas, señalan fuentes de los grandes almacenes.
El expresidente no acepta esta indemnización porque no incluye la solución a la disputa por la herencia de la sociedad instrumental, Cartera de Valores Iasa, que posee el 22% de el corte inglés. Dos tercios de las participaciones de esta empresa pertenecen a las hijas, y herederas, de Isidoro Álvarez, y un tercero a la familia de Gimeno, en concreto, él, su madre y su tío.
El ex presidente del grupo fue destituido con el apoyo de siete consejeros, Marta y Cristina Álvarez -las hijas de Isidoro Álvarez y primas de Gimeno- Carlos Martínez, Florencio Lagasa, Víctor del Pozo, Jesús Nuño de la Rosa y Paloma García Peña, en representación del fondo Mancor. Manuel Pizarro y el jeque qatarí Al Thani no manifestaron el sentido de su voto.
A partir de ahí, Gimeno inició una batalla judicial presentando una demanda para impugnar el Consejo en el que fue destituido. El Juzgado de lo Mercantil número 12 Madrid admitió a trámite la demanda. Asimismo, el 27 de julio, el expresidente presentó una querella criminal contra el exresponsable de Seguridad, Juan Carlos Fernández Cernuda, por unos presuntos delitos societarios y de corrupción entre particulares.
En cualquiera de los casos, Gimeno dejará de ser consejero delegado, bien porque acepte los diez millones de euros y dimita voluntariamente, bien porque sea destituido.