Un diputado conservador la ha presentado ante el grupo parlamentario.
James Duddridge, diputado del partido tory, presentó ayer una cuestión de confianza contra Theresa May, primera ministra británica, como líder de la formación conservadora. De prosperar, la premier sería expulsada de Downing Street. “Esta mañana he escrito a Graham Brady”, líder del grupo parlamentario, “para decirle que no tengo confianza en Theresa May”, ha dicho el diputado en una entrevista. En el texto, Duddridge argumenta que el partido “necesita un líder fuerte, alguien que crea en el Brexit y que sea capaz de darle al electorado lo que votó”.
Reivindicándose leal a la formación, entiende que “llega un momento en que la lealtad ciega no es la manera adecuada de seguir adelante”. “Escribo esto con gran pesar en mi corazón, pero necesitamos unas elecciones para el liderazgo y seguir adelante”, mantiene.
En la carta, el diputado también asegura que ninguno entre los representantes de su partido en Westminster piensa que May es la adecuada para liderar a su formación en unas elecciones, después de los resultados “desastrosos” de los comicios del año pasado.
Es evidente la división interna en el Partido Conservador y en el Gobierno por cómo afrontar el Brexit cuando cada vez queda menos tiempo y no se alcanza un acuerdo con la Unión Europea. En el propio aparato de la formación hay consenso acerca de que May debe dejar el cargo, pero la duda es cuándo. O se mantiene hasta las próximas elecciones generales o dimite el día después de la salida de la UE.
El Comité 1922, el órgano que gestiona el partido tory en el Parlamento deberá esperar a que al menos el 15% de los diputados de su formación envíen una carta manifestando la pérdida de confianza en su líder. Hay precedentes. El más cercano fue en 2003, cuando Iain Duncan Smith fue destituido mediante esta herramienta, cuando el Partido Conservador estaba en la oposición.