Crece el riesgo de recesión en la eurozona

Crece el riesgo de recesión en la eurozona

El riesgo de que la zona euro entre en recesión va aumentando, pese a los datos del tercer trimestre, que han superado las expectativas.

Sin embargo, la contracción que se calcula de la actividad no aparenta ser suficiente para rebajar la inflación a los niveles que tiene como objetivo el Banco Central Europeo (BCE).

Por tanto, la autoridad monetaria tendrá que seguir subiendo los tipos de interés con el fin de que la inflación “se arraigue”.

Así lo ha trasladado Christine Lagarde, presidente del BCE. “Aunque los datos recientes del crecimiento del PIB han sorprendido al alza, ha aumentado el riesgo de recesión”, advirtió en un acto en Estonia.

Reconoció que el deterioro de la actividad económica “podría verse acentuado por el endurecimiento simultáneo de la política monetaria a nivel mundial”.

No obstante, Lagarde reiteró que no se espera que la desaceleración del crecimiento afecte determinantemente a la inflación a corto plazo.

Es más, dijo, el endurecimiento de la política monetaria estadounidense impulsa la inflación a corto plazo por la pérdida de valor del euro frente al dólar. Esto, a su vez, conlleva que suban los precios de las materias primas.

La eurozona entera, incluida España, podría entrar en recesión

Así, la banquera francesa destaca que los bancos centrales “tienen que confiar en su brújula interna”, es decir, cumplir con su mandato.

Es el modo, señaló, de garantizar la estabilidad de precios y deben de estar listos para adoptar las medidas necesarias para rebajar la inflación.

De no ser así, explicó, la consecuencia se traduce en que una inflación alta se consolide y sería peor para todos.

En ese sentido, Lagarde aseguró que “no debemos permitir, y no permitiremos, que la inflación alta se arraigue”.

“Tenemos el compromiso de que la inflación vuelva a situarse en nuestro objetivo a medio plazo, y la determinación de adoptar las medidas necesarias para hacerlo”, sentenció.

De ahí que afirmara que “tendremos que subir los tipos de interés hasta niveles que permitan que la inflación vuelva a nuestro objetivo del 2% a medio plazo”. “Aún nos queda camino por recorrer”, apostilló.

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