Definitivamente, el Gobierno pedirá la retirada de la Proposición de Ley para la reforma del modo de elección del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).
Así lo anunció Juan Carlos Campo, ministro de Justicia, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros de ayer. Una proposición muy contestada por los jueces y sobre la que mantenía estrecha vigilancia la Unión Europea y el Consejo de Europa.
Pedro Sánchez ya invitó a Pablo Casado a dejar esa reforma exprés del CGPJ congelada mientras se negociaban las renovaciones de los cargos caducados.
Se vuelve de este modo al bloqueo institucional que mantiene al órgano de gobierno de los jueces en funciones desde diciembre de 2018.
Dicha renovación sigue sin producirse. Sin embargo, sí se aprobó una modificación de forma que el CGPJ no puede hacer nombramientos una vez terminado su mandato.
Entretanto, Unidas Podemos amaga con rescatar la reforma del sistema de nombramientos por la falta de acuerdo y el bloqueo del PP.
Por otro lado, el ministro de Justicia enmarcó esa retirada en la aprobación de la Ley de Eficiencia Organizativa de la Justicia. En base a ella se crean los tribunales y “profundiza en la democracia interna del Poder Judicial”.
Así se lo trasladó a Vera Jourova, la responsable de Justicia de la Comisión Europea. El foco se pone en las “políticas de eficiencia”. “Cualquier cosa que se quiera buscar es ganas de poner palos en las ruedas. Ya dijo el presidente Sánchez que la proposición queda congelada y eso le hice ver”, respondió Campo a una pregunta.
Añadió que la reforma hecha que impide hacer nombramientos cuenta con el beneplácito de Jourova, aseguró el ministro. Es, dijo, conforme a derecho y a ese respecto la responsable de Justicia del Ejecutivo comunitario no tuvo nada que indicar.