El próximo martes se celebrará un Pleno extraordinario en el que el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) intentará votar, y elegir, a sus dos candidatos al Tribunal Constitucional (TC).
Así lo ha acordado el cónclave ordinario celebrado este jueves con las propuestas de César Tolosa y María Luisa Segoviano, ambos del Tribunal Supremo (TS). No obstante, la magistrada ya no pertenece al Alto Tribunal por jubilación.
Precisamente, Tolosa el que más votos obtuvo en el Pleno extraordinario del pasado martes, propuesto por el ala conservadora. En concreto, consiguió 10, uno menos de los requeridos.
Por otra parte, aunque ahora la proponen los conservadores, Segoviano figuraba entre los nueve candidatos que presentó el ala progresista.
Dicho esto, hasta el inicio del Pleno extraordinario del próximo martes podrán presentarse candidaturas.
De este modo sucedió en el último cónclave convocado en este sentido. Sólo figuraba en el orden del día Pablo Lucas, también del tribunal de casación.
En cambio, en el último momento, los progresistas presentaron a José Manuel Bandrés, cuya candidatura respaldan desde el 3 de noviembre.
Así, los conservadores vienen retrasando la elección de los candidatos. Sin embargo, ven que la reforma del sistema de elección de los magistrados que pretende el Gobierno está cada vez más cerca.
De ahí este movimiento, con la intención de resolver la cuestión antes de que la ahora reforma bloqueada salga adelante a primeros de año.
Esto es porque el Ejecutivo ya ha puesto en marcha otro mecanismo para modificar las mayorías para elegir a los magistrados del Constitucional.
Esta reforma pretende que los aspirantes elegidos sean los que más votos reciban. En este caso, uno sería de cada ala y por la parte progresista sería Bandrés.
En la actualidad, se necesita una mayoría de tres quintos, es decir, 11 votos. Además, las reglas vigentes permiten que cada vocal, 18 en total, proponga y vote a dos candidatos.
Al incluir a Segoviano en su propuesta, la parte conservadora persigue que la progresista renuncie a Bandrés. De este modo, el CGPJ elegiría a Pablo Lucas, que también estaba en el listado de nueve inicial, y a la magistrada.
Uno siente cierta vergüenza al comprobar las estrategias torticeras que los jueces conservadores en el seno del CGPJ utilizan para no llegar a acuerdos ajustándose a lo que la norma dicta actualmente y que siempre puede ser susceptible de cambio por el legislativo.
Cuando estas cosas pasan sólo cuando gobierna la izquierda, como es posible que el PP hable de independencia judicial. ¿Porqué no cambiaron la norma cuando gobernaron?
¿Los jueces del CGPJ que tenían un plazo emanado del poder legislativo para la elección de los miembros del TC, se están saltando la ley?. Porqué de ser así ¿ quién demanda y juzga a estos jueces?.
En fin, las instituciones no están en peligro, solo esta en peligro, especialmente y no es poco, de credibilidad, el órgano de los jueces y el TC , es decir la judicatura.