La suspensión de las clases presenciales a causa de la crisis del coronavirus podría extenderse hasta “mayo o junio”. Lo ha dicho en una entrevista en TVE Isabel Celaá, ministra de Educación y Formación Profesional. “Tenemos esperanza y confianza en el hecho de que los alumnos puedan al menos regresar presencialmente 15 o 20 días”. Es algo, matizó, “que puede producirse en mayo o en junio”.
La actividad docente presencial quedó paralizada desde la entrada en vigor del estado de alarma. Algunas comunidades autónomas, como Madrid, La Rioja y parte del País Vasco se anticiparon y suspendieron las clases presenciales antes.
Un colectivo especialmente afectado es el de los alumnos de segundo de bachillerato que tiene que presentarse a la Evaluación de Acceso a la Universidad. Por ese motivo, Celaá y los consejeros autonómicos de Educación consensuaron un nuevo calendario para las pruebas de la EvAU. Así, éstas se realizarán entre el 22 de junio y el 10 de julio.
En la entrevista, la ministra de Educación manifestó que son las fechas “recomendables” y confía en que puedan hacerse en “circunstancias normales”.
En otra entrevista en Onda Cero, reiteró que “ningún alumno va a perder el curso por el coronavirus”. Celaá señaló que “en la inmensa mayoría de centros se había culminado el segundo trimestre”. Ahora, dijo, “hay que organizar el último”.
Explicó que “los alumnos están trabajando con esperanza y aplicación y tenemos la confianza de poder regresar a las aulas, sino de una manera plena de una forma escalonada para hacer un repaso general”. “Mantenemos la confianza abierta de poder atender alumnos de manera presencial en el último trimestre”, añadió.
La idea es que al menos puedan ir a clases presenciales “quince días, para hacer un repaso de aquellos contenidos que han sido estudiados”. Tanto por “vía telemática o los de los dos primeros trimestres”.
Además, la ministra aseguró que se está trabajando en solucionar los problemas de la brecha digital. La línea es identificar a “aquellos alumnos que, por las circunstancias de distinta naturaleza, no estuvieran conectados con el profesorado”.
En Formación Profesional, “»los alumnos van a ser examinados exactamente igual que los de Bachillerato, es decir terminaran sus cursos en la misma fecha”. De este modo, los que quieran podrán presentarse a la EvAU.
Dedicó un especial capítulo a los estudiantes del segundo curso de bachillerato de los que dijo que es preciso reducir la tensión. “Hay que rebajar la tensión de estos alumnos, hay que buscar el equilibro”. También, garantizar “que van a tener condiciones justas en su examen para la universidad”.