La Fiscalía Especial Anticorrupción asume la investigación sobre el caso Negreira, hasta ahora en manos de la Fiscalía Provincial de Barcelona.
Así lo ha ordenado Álvaro García Ortiz, fiscal general del Estado, considerando que se trata de supuestos delitos de especial transcendencia, según un comunicado.
Un caso Negreira sobre presuntos sobornos del FC Barcelona a José María Enríquez Negreira, exvicepresidente del Comité Técnico Arbitral (CTA).
Este organismo tiene entre sus funciones designar los árbitros de las competiciones de fútbol en España.
Precisamente, el pasado viernes la Fiscalía de Barcelona presentó una denuncia por unos supuestos delitos de corrupción entre particulares en el ámbito deportivo, administración desleal y falsedad en documento mercantil.
La denuncia es contra el club blaugrana como persona jurídica y dos de sus expresidentes, Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu.
Asimismo, contra dos exdirectivos del Barça, Óscar Grau y Albert Soler, además de contra el propio exdirectivo del CTA.
El caso Negreira se extiende de 2001 a 2018
Los acusa de una presunta corrupción por 7,3 millones de euros que el club barcelonés habría pagado a Negreira entre 2001 y 2018.
No obstante, la investigación sólo se puede centrar en el periodo entre 2014 y 2018 porque los delitos de años anteriores habrían prescrito.
Por tanto, a partir de ahora será la Fiscalía Especial contra la Corrupción y la Criminalidad Organizada quien asuma las pesquisas y acusación del caso.
Según la denuncia, los pagos de hasta los citados 7,3 millones de euros representan “una auténtica remuneración no prevista en los estatutos del club”. Tampoco, “aprobada por la Asamblea General”.
Además, hace hincapié en que lo que Negreira recibió no tuvo “soporte legal ni estatutario alguno”.
De este modo, la Fiscalía señala que dos empresas del ex número ‘dos’ de los árbitros emitieron facturas al FC Barcelona.
Facturas sin justificar
En cambio, se giraron “sin que las mismas respondieran a ninguna prestación o servicios de asesoramiento técnico real”.
De hecho, se apoya en que Negreira facturó 2.971.673,01 euros en el periodo que se investiga.
Asimismo, la Fiscalía sostiene que las cuentas en las que el exdirectivo arbitral recibía las cuantías “se nutrían prácticamente en su totalidad de los ingresos procedentes del FCB”.
Afirma, a su vez, que los importes se retiraban, “en su gran mayoría, mediante cheques al portador” a través de terceras personas. Éstas entregaban luego a Negreira las cantidades en efectivo.
Por otro lado, cuando el exdirectivo dejó su puesto en el CTA, el Barça dejó de pagarle. Entonces, Negreira se lo reprochó a Bartomeu en un burofax que el Ministerio Público reproduce en su denuncia.