Unos 370.000 autónomos mantienen sus actividades cerradas y más de 1,6 millones de trabajadores por cuenta propia afirman que han visto caer su actividad por encima del 60% en lo que va de año.
Son los datos que se desprenden del barómetro sobre la situación de los autónomos, correspondiente a septiembre. Lo ha elaborado la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA) y lo recoge Europa Press.
Entre los que tienen el negocio cerrado, el 7,7% asegura que lleva así desde marzo. Mientras, casi el 60% afirma que, aunque ha abierto, está funcionando al 50%.
Tan sólo el 16% de los trabajadores por cuenta propia encuestados dice que está abierto y funcionando con total normalidad.
El informe destaca, además, que 500.000 autónomos prevén disminuir su plantilla a lo largo de este año. El 54% de los encuestados no tiene liquidez para hacer frente al despido de sus trabajadores.
Ya se apuntaba a ello en un anterior barómetro elaborado por ATA a mediados de agosto.
Lorenzo Amor, presidente de ATA, ha dejado claro que es una situación “de emergencia” en la que “ya se va tarde”. Exige tomar medidas “ya” para salvar las actividades, empresas y trabajadores “que los autónomos generan”. A su vez, afirma que el país vuelve a estar en una situación “extraordinaria” que necesita de “medidas extraordinarias”.
Según refleja el documento, ocho de cada 10 autónomos, ha visto reducida su facturación, con respecto al año anterior. No obstante, para la mayoría, el incremento ha sido entre un 10 y un 30% en comparación con la del año anterior.
La morosidad es otro lastre para los autónomos
Los autónomos han dejado constancia de que la morosidad sigue siendo uno de sus principales problemas. De hecho, uno de cada tres ha señalado que la está sufriendo.
Según el mismo informe, un 48,7% de autónomos se benefició de las ayudas por cese de actividad, aplicadas durante los meses de julio, agosto y septiembre. Sin embargo, un 51% no ha podido acceder, durante el estado de alarma, a la prestación extraordinaria.
ATA ha alertado de que la prestación por cese de actividad que se podía solicitar desde el 1 de julio no tiene nada que ver con el contexto real que viven los autónomos y que ha sido “un fracaso”. De hecho, apunta que solo un 7,1% la ha solicitado y, de este porcentaje, se le ha concedido al 72,2%.
Tres de cada cuatro autónomos, el 75,7%, consideran “imprescindible” el cobro de cualquier medida de cese de actividad (ordinaria o extraordinaria) “para la continuidad de su negocio”.
Las medidas que creen necesarias para no cerrar su negocio, pasan por la reducción de la cotización a la Seguridad Social, ligada a la caída de la actividad en un mínimo del 50%. También, el restablecimiento del cese de actividad extraordinario. De este modo paliarían las consecuencias económicas de las medidas sanitarias adoptadas en las zonas donde se declaren nuevos brotes.
Asimismo, destacan la propuesta de obtener reducciones fiscales para aquellos que en momentos complicados han mantenido al 100% de su plantilla o la prórroga de los ERTE hasta abril de 2021.
Previsión para este año
El barómetro analiza la opinión de los autónomos sobre si su negocio podrá mantener la actividad a lo largo de este año. Apunta que el 85,5% verá reducida su facturación, mientras que un 8,1% espera mantenerla y solo el 2,5% asegura que la aumentará.
ATA destaca que “el pesimismo se ha instalado en las respuestas”, puesto que el 51,6% los encuestados prevé que la economía tardará más de dos años en recuperarse. Sólo el 1,5% cree que lo hará en seis meses.
En el caso de un segundo confinamiento, el 15,9% asegura que podría seguir con su actividad, pero casi un 18% deja claro que supondría el cierre definitivo de su negocio.