La reunión celebrada entre Pablo Casado, presidente del PP, e Inés Arrimadas, portavoz de C’s en el Congreso, con el fin de encontrar una forma de coalición con vistas a las próximas citas electorales en Cataluña, País Vasco y Galicia, tuvo lugar ayer tarde en la Cámara Alta.
Según trasladó Casado en una entrevista en esRadio, la intención es alcanzar un acuerdo para concurrir juntos a las elecciones vascas y gallegas del 5 de abril, aunque en relación a Galicia el PP es “una marca que ya aglutina a todo el electorado de centro-derecha en sus siglas”. Arrimadas, por su parte, considera de gran importancia que concurran unidas las dos formaciones en las tres comunidades para lograr hacer frente a los nacionalismos.
Al finalizar la reunión, Arrimadas realizó unas declaraciones en las que trasladó que se había producido un avance en la coalición electoral para el País Vasco. Sin embargo, siguen “a la espera de superar el escollo de Galicia”.
“No entendemos que lo mismo que nos pide el PP a nosotros en Cataluña no sea lo que nos ofrecen en Galicia”, ha manifestado la portavoz de Ciudadanos, en rueda de prensa, tras la reunión. La oposición para formar una coalición para esta comunidad viene tanto de parte de Casado como de Feijóo.
Según manifestó Arrimadas, en la coalición gallega, el Partido Popular seguiría manteniendo sus siglas, además de continuar liderando Feijóo. Pero aún así, Teodoro García Egea, secretario general del PP, ha subrayado, en rueda de prensa, que no “están dispuestos a renunciar” al proyecto del PP en Galicia.
Por su parte, Alberto Núñez Feijóo, presidente de la Xunta, ha declarado tras la reunión de la junta provincial del PP en A Coruña, que no cree “que se deban utilizar las elecciones gallegas […] para hacer una campaña interna dentro de Ciudadanos”. Considera además que su candidatura es “un punto de encuentro” para muchos gallegos, incluidos los que “en las elecciones generales han votado a otros partidos”. “Ahí caben no solo los votantes si no los dirigentes de Ciudadanos”, ha subrayado, abriendo la posibilidad de que exista negociación a la hora de elaborar las listas electorales.
La reunión celebrada en la tarde de ayer entre Casado y Arrimadas pretende el objetivo de concurrir a las elecciones autonómicas vascas y gallegas, del 5 de abril, y a las catalanas aún por convocar, de manera conjunta. Respetando el liderazgo que sería asumido por quien estuviese a la cabeza de los resultados electorales.