“¿No se da cuenta de que es partícipe y responsable del golpe de Estado que se perpetra en España?”, espetó al presidente.
Con ese durísimo ataque se dirigió Pablo Casado, líder del PP, a Pedro Sánchez, jefe del Ejecutivo, durante el Pleno del Congreso de ayer, en el que criticó que el presidente fuera a la Cámara Baja a hablar sobre el Brexit y mantenga que la “segregación no es posible”, pero que “está sentado en el banco azul del Gobierno gracias a los votos de los independentistas”.
El dirigente popular volvió a acusar al Gobierno de ser “rehén” de los partidos “golpistas” y de enviar a la cárcel de Lledoners “emisarios” a negociar los Presupuestos. En su opinión, el Ejecutivo está siendo “chantajeado” por los independentistas que amenazan con no respaldar las Cuentas si la Fiscalía no retira las acusaciones de rebelión y sedición.
Así, Casado afirmó que “hay una Constitución y hay que defenderla” y que “la soberanía nacional reside en el pueblo español en su conjunto”. “Estamos en el Estado más descentralizado de la Unión Europea y tenemos más competencias que los lander alemanes”, subrayó.
También acusa al Ejecutivo de dejar “tirados” a los jueces y sostiene que España no puede ser “humillada” por tribunales “regionales” de otros países. Propuso que se incluya la sedición y la rebelión entre los delitos de entrega. “Así, los delincuentes que se escapen de España no tendrán que estar al albur de un tribunal alemán o belga a que nos lo entreguen. Eso es Schengen”, destacó.
El presidente del PP criticó duramente la gestión de estos cuatro meses de Gobierno socialista y repasó todos los asuntos actuales: Cataluña, inmigración, Presupuestos o la situación en Venezuela. También recordó que Sánchez no ha ido al Parlamento a explicar la cuestión de su tesis doctoral.
Asimismo, dijo que el Ejecutivo se “cae a trozos” e hizo referencia al sangrante hecho de que Dolores Delgado, ministra de Justicia, reprobada por el Parlamento, participará en una reunión con una estructura de “cloaca policial” y no denunciar asuntos que allí se trataron. También habló de los dos ministros “dimitidos”, Maxim Huerta y Carmen Montón, y le recriminó que no haya rendido cuentas por la sanción a Josep Borrell, ministro de Exteriores, por utilizar “información privilegiada” en la venta de unas acciones, así como la “ocultación” de patrimonio de Isabel Celaá o la sociedad patrimonial de Pedro Duque.
Por otro lado, se defendió por su viaje a Bruselas en el que, afirma, que fue a decir que “nos preocupa la deriva presupuestaria, política y territorial que hay en España” y no a hablar “mal” del país.
Respecto a cuestiones económicas, planteó que el Gobierno socialista recibió un “país saneado” y recriminó al presidente que “en vez del 1,3 quiera ir al 1,8” de senda de déficit aprobada por el Congreso en “medio de las incertidumbres” existentes, y recalcó que desde que el PSOE gobierna se ha duplicado la prima de riesgo española. “El problema es que a usted le vean como una administración tóxica como la italiana”, avisó.
Llegó a comparar al presidente con José Luis Rodríguez Zapatero y el Plan E de su último mandato. “Es una réplica de Zapatero, usted copia, corta y pega lo que él hizo”, enfatizó.
Dijo que Sánchez quiere financiar su campaña electoral durante los próximos dos años “destrozando una vez más la economía”, mientras que la formación conservadora quiere “acabar con la pobreza, no con los ricos”. “No cuadran los ingresos, los gastos ni el plan que tiene usted para España. El problema es que ahora no estamos para bromas” aseguró. “No queremos otra recesión señor Sánchez ni que el peso es dejé una vez más un país hundido, arruinado y quebrado”, añadió.
Finalmente, en su línea como si de un Debate sobre el Estado de la Nación se tratara, criticó que el gobierno no condene a Nicolás Maduro. “¿Le da igual porque está Zapatero de asesor y sus socios políticos le piden que no se meta con Venezuela? Habla mucho de Arabia Saudí, pero no habla de Venezuela”, y, para acabar, pidió que tenga “dignidad” y defienda los derechos humanos en el país caribeño.
Todo lo que ha dicho Casado son calumnias y mentiras. Lo que este Gobierno Progresista intenta, con los pocos recursos que tiene a su alcance, es crear un estado de bienestar en España, y si en las próximas elecciones las gana este Gobierno Progresista,el estado de bienestar seguirá siendo su objetivo. En relación con Cataluña, aplicar un 155 sería más odio y más falta de convivencia entre la sociedad Catalana sobre todo por parte de los separatistas. Pedro Sánchez es muy, muy prudente, tiene más formación de Estadista que Casado, que se ha radicalizado tomando el camino, los dictados de la ultraderecha.¡ Pobre de España si entre Casado y Ribera, que es el moderno José Antonio Primo de Rivera, llegaran a formar Gobierno !
Casado ha dicho en el Congreso de los Diputados que Pedro Sánchez es partícipe y responsable del golpe de Estado que se perpetra en España. Lo está acusando de golpista.¿ Qué está diciendo ese impresentable personaje? está desvariando, vive en el pasado, no creo que sea demócrata . Casado está alegrándose interiormente que un golpe de Estado, que nunca llegaría a producirse en esta España democrática, le beneficiaría , también al José Antoniano apellidado Rivera y a Vox, o sea a la rancia ultra derecha de España. Pensando mal, ¿es eso lo que quiere Casado para España ? Está acusando a Pedro Sánchez de golpista, pero los golpistas serían él, Rivera y Vox.