“El viernes habrá pleno de investidura y habrá candidato”, ha anunciado Laura Borràs, la presidente del Parlament catalán, pese a las reticencias de JxCat a investir ya a Pere Aragonès, el candidato de ERC.
La mujer de paja de Carles Puigdemont llegó a amenazar con suspender el pleno previsto para esta semana con la excusa de la falta de consenso en torno a un candidato. Finalmente, ha cedido a las presiones de los republicanos y el debate se llevará a cabo.
Puigdemont se conjuró para hacer sufrir a ERC antes de convertir a Aragonès en president y hacerse con consellerias estratégicas. Sin embargo, Borràs, al mantener el pleno, cumple con el plazo de diez días desde la constitución de la Cámara, como marca la ley.
Su anuncio fue en una entrevista en TV3, si bien no se manifestó en cuanto a si será Aragonès el encargado de defender su investidura. La otra opción sería Salvador Illa, el candidato socialista y que ganó las elecciones, aunque no cuenta con los apoyos suficientes.
Con todo, subrayó que “los espacios políticos del independentismo están trabajando para un acuerdo que represente los resultados del 14-F”.
Por tanto, se inician los contactos para proponer una candidatura, mientras en el trasfondo se hace sentir el preacuerdo entre ERC y la CUP. No es seguro que ese pacto se cumpla puesto que sectores cupaires, como Endavant, no secundan el acuerdo y podrían hacerlo fracasar en las asambleas de la formación.
Asimismo, lo más probable es que Aragonès no reciba el apoyo de los neoconvergentes para resultar elegido en una primera votación. De cumplirse esa negativa, sería el domingo cuando se lleve a cabo una segunda.
Y es que las relaciones entre JxCat y ERC siguen viciadas, con grandes diferencias en asuntos cruciales. Uno de ellos es qué rol jugará el fugado Puigdemont en esta legislatura.
Mientras que los neoconvergentes siguen reivindicándolo como legítimo president, los republicanos no están por la labor de darle protagonismo. A su vez, se disputan distintas carteras decisivas en la marcha y la deriva del nuevo Govern catalán.