El propio Joe Biden, presidente de Estados Unidos, ha reclamado la necesidad de regular las armas de fuego en el país tras la masacre de Robb.
Un episodio más de violencia en una escuela de primaria en la ciudad de Uvalde (Texas) por el que, por el momento, han perdido la vida 21 personas. De ellas, 19 eran niños.
“Es hora de actuar”, ha proclamado en una comparecencia. “Estoy harto y cansado” de que “hermosos, inocentes y estudiante de segundo, tercer y cuarto grado vean morir a sus amigos”, arrancó su intervención. “Como si estuviesen en un campo de batalla”, añadió.
Así, aseguró que “este tipo de tiroteos masivos rara vez ocurren en otras partes del mundo. ¿Por qué estamos dispuestos a vivir con esta carnicería? ¿Por qué seguimos dejando que esto suceda?”, se preguntó.
“Es hora de convertir el dolor en acción”, ha insistido. A renglón seguido, Biden nombró otras matanzas que se guardan en la memoria colectiva de los estadounidenses.
Son los casos de Marjory Stoneman Douglas, en Parkland (Florida), o la de Santa, en Texas. “La lista sigue y sigue cuando incluye tiroteos masivos en lugares como cines, lugares de culto”, señaló. “Como vimos hace apenas diez días en una tienda de comestibles en Buffalo, Nueva York”, añadió.
Así las cosas, la Casa Blanca emitido un comunicado en el que indica que la bandera de Estados Unidos ondeará a media asta. Lo hará hasta el 28 de mayo tanto en la residencia oficial del mandatario como en otros edificios y terrenos públicos. Asimismo, en embajadas y consulados en el exterior.
La matanza de este martes en la escuela de primaria Robb ha vuelto a traer a la mente de los estadounidenses otras tragedias semejantes.
Por ejemplo, el tiroteo en la Escuela Secundaria Columbine en 1999 o el ataque perpetrado en la Escuela Secundaria Marjory Stoneman Douglas, en Parkland.
Además, el actual presidente de Estados Unidos era vicepresidente de Barack Obama cuando sucedió el tiroteo de Sandy Hook, hace casi diez años.
“Desde entonces ha habido 900 incidentes”, explicó, para añadir que la idea de que un joven de 18 años pueda comprar dos rifles es “enferma”.