En rueda de prensa desde la Casa Blanca, Joe Biden, presidente de Estados Unidos, ha responsabilizado a Estado Islámico Provincia de Jorasán del doble atentado suicida de este jueves.
En él murieron alrededor de 170 civiles afganos y 13 militares estadounidenses, además de dejar cientos de heridos.
El presidente de EEUU anunció, además, que ha pedido a las Fuerzas Armadas planes operativos para posibles ataques contra el grupo yihadista.
Aunque, aclaró, no están “seguros” de que Estado Islámico, los servicios secretos de Estados Unidos apuntan al grupo terrorista como autores de los atentados.
Por eso, aseguró, “los perseguiremos y les haremos pagar”. Biden advirtió de que “no perdonará” el ataque. “Voy a defender nuestros intereses y a nuestro pueblo con todo lo que esté bajo mi mando”, remarcó.
Así, otorgará “fuerzas adicionales” si los militares estadounidenses en Afganistán lo necesitan, añadió.
A renglón seguido hizo el anuncio de que ha ordenado a los comandantes militares que desarrollen “planes operativos para atacar a los activos, el liderazgo y las instalaciones” de la facción de DAESH en Afganistán.
Completarán la evacuación
Asimismo, aseveró que “responderemos con fuerza y precisión en nuestro tiempo, en un lugar que elijamos y de la manera que elijamos”. “No ganarán”, insistió.
De este modo, Biden remarcaba que “Estados Unidos no se dejará intimidar”. Al tiempo, aseguró que “rescataremos a los estadounidenses y sacaremos a nuestros aliados afganos”.
Con ello hacía hincapié en que su intención es completar la evacuación que comenzó tras la toma de Kabul por parte de los talibán.
Por su lado, los comandantes estadounidenses en Kabul han señalado que pueden completar la misión, comentó el inquilino de la Casa Blanca.
Biden asume su responsabilidad
“Me responsabilizo fundamentalmente de todo lo que ha ocurrido últimamente. Este es el trato, ya saben, que el anterior presidente hizo con los talibán para sacar a todas las fuerzas estadounidenses de Afganistán antes del 1 de mayo”, recordó. Biden cambió la fecha a la actual del 31 de agosto.
Por último, también recordó que “nunca” consideró que debiera “sacrificar vidas estadounidenses para tratar de establecer un gobierno democrático en Afganistán”.
Asimismo, reiteró que el interés de EEUU al llegar a Afganistán era evitar que Al Qaeda “resurgiera”.