Ya van siete semanas efectivas de huelga de la Atención Primaria (AP) en la Comunidad de Madrid. Diez de reivindicaciones contando con las tres en que se desconvocó temporalmente para estudiar las propuestas de la Consejería de Sanidad.
El 12 de enero, los médicos y pediatras de la primera línea asistencial sanitaria volvieron a los paros y se bloquearon de nuevo las negociaciones.
Así, este domingo, unos 200 facultativos de la Atención Primaria se concentraron en la plaza Reina Sofía de la capital madrileña.
Defienden, de este modo, el servicio sanitario en el marco de la huelga indefinida que arrancó el pasado 21 de noviembre.
Bajo el lema ‘Por una Atención Primaria de calidad. Por los pacientes, por los profesionales’, presionan a la espera de otra reunión con el Gobierno regional. Esperan que esta vez se pueda alcanzar un acuerdo para desconvocar los paros.
El Gobierno regional denuncia intereses políticos de la Atención Primaria
Sin embargo, en su línea, el Ejecutivo madrileño reprocha que los facultativos alarguen la huelga por intereses políticos.
Lo ha hecho mediante palabras de David Pérez, consejero de Transportes e Infraestructuras, acusando de intentar desprestigiar la imagen de la “mejor Sanidad de España”.
Así, el comité de huelga ha registrado varias peticiones formales de reunión y se mantiene a la espera de una respuesta acerca de la fecha.
Se suman a las que ha propuesto la intermediación de tres profesionales médicos de reconocido prestigio, algo que la Consejería ha rehusado.
En ese contexto, este lunes arranca el programa piloto que el Gobierno de la región anunció sobre el exceso de agenda médica en centros de salud.
Este asunto es, precisamente, una de las reivindicaciones de los médicos y pediatras en huelga, representados mayoritariamente por el sindicato Amyts.
Programa piloto sobre la agenda médica
De acuerdo con el modelo, los facultativos de familia dedicarán 10 minutos a cada paciente y atenderán a un máximo de 34 diarios.
En el caso de los pediatras, el tiempo de dedicación se amplía a 15 minutos y el número de personas que atenderán se reduce a 24.
Partiendo de ello, se creará una bolsa nueva en cada centro para que otros facultativos de Atención Primaria cubran el exceso de demanda.
Con todo, los médicos y pediatras podrán atender, voluntariamente, dicho exceso de demanda, a partir de35 y el 25, respectivamente.
Tendrán que hacerlo en turno contrario hasta cubrir un máximo de 4 horas y con una retribución de 50 euros por hora. Por tanto, podrá alcanzar los 200 euros al día.
Pese a todo, el comité de huelga recogió el proyecto con “prudencia” y “escepticismo”.
Negociaciones con pocos visos de mejorar
Así las cosas, las negociaciones están en un punto muerto tras el fracaso de la última reunión el pasado 11 de enero. Además, los reproches mutuos persisten, por lo que no se vislumbra un acuerdo cercano.
Por su lado, el comité de huelga insiste en la intermediación, lo que el Gobierno regional rechaza. Asimismo, exigen la puesta en marcha de un plan de choque en la Atención Primaria por un mínimo de 42 millones de euros.
De ellos, 12 millones se destinarían al pago del turno de tarde, mientras que los restante 30, a los complementos económicos.
A su vez, los datos del comité de huelga señalan que, de los 300 facultativos que terminaron sus estudios en los dos últimos años, sólo se quedaron 40.
Al mismo tiempo, recriminan que 280 médicos y pediatras rechazaron en el último año los contratos que la Consejería ofreció nada más acabar la especialidad.
A ese respecto, recuerdan los acuerdos incumplidos de setiembre de 2020. En concreto, el aumento acordado de la retribución en 479 euros brutos al mes, es decir, 30 millones de euros.
En cuanto a la incentivación y que los puestos de tarde resulten atractivos, reclaman medidas inmediatas. Argumentan que alrededor de un millón de madrileños no tienen médico asignado, de ellos 200.000 menores.