Como anunció Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, el Consejo de Ministros extraordinario de este viernes ha aprobado el límite al precio del gas para generar electricidad.
Este mecanismo tiene una vigencia de doce meses y fija el precio en una media de 48,8 euros por megavatio/hora (MWh).
De este modo, se cubre el próximo invierno, a una estación en la que los precios de la energía se encarecen.
Tras la reunión de los ministros, Teresa Ribera, ministra de Transición Ecológica, ha comparecido en rueda de prensa.
En ella, ha valorado la aprobación de este límite al precio del gas para generar electricidad. Una respuesta, dijo, que “tiene pocos antecedentes o ninguno” en el pasado.
Asimismo, señaló que Europa ha comprendido “las causas por las que España y Portugal deben contar con esta excepción”.
Además, será “un paraguas” con el fin de proteger a los consumidores domésticos y a la gran industria ante la escalada de los precios.
Al tiempo, destacó que “por primera vez no pagarán los mismos”. Explicó que este mecanismo tiene el objetivo de “reducir los beneficios extraordinarios de las eléctricas para que haya beneficios para todos”.
Así las cosas, las centrales térmicas de gas, los ciclos combinados, en continuarán cobrando lo que sea necesario para asegurar el suministro eléctrico.
A ese respecto, el coste sólo se repercutirá sobre los consumidores que se benefician de este límite en cada momento. En todo caso, será menor que el ahorro final que la medida proporciona.
Por otro lado, la ministra apuntó que este mecanismo entrará en vigor al día siguiente de que se publique en el Boletín Oficial del Estado.
El límite al precio del gas hispano-luso debe aprobarse en Bruselas
No obstante, como advirtió Bruselas, queda sujeto a que la Comisión Europea adoptar formalmente el respaldo a la norma.
Esto podría retrasarse “unas dos semanas”. Sin embargo, representará una mejora inmediata para un 37% de los consumidores domésticos y para el 70% de los industriales.
Asimismo, calculó que con esta medida el precio caerá alrededor de un 38% de media. Esto supone una bajada desde los 210 euros por MWh que marcó en el primer trimestre de 2022 a alrededor de 130 euros por MWh.
Así, los consumidores sólo pagarán a coste de gas la electricidad producida por centrales de gas.
Además, contribuirá a reducir la inflación y la escalada de precios por los altos costes energéticos derivados de la guerra en Ucrania.