Se pretende, así, que se contaminen ríos, mares y acuíferos.
Según publica el medio mexicano Verne, la secretaria de Medio ambiente de México publicó en Twitter un mensaje como si los Reyes Magos lo enviarán para que los niños y las niñas no envíen sus cartas este año utilizando globos de helio. “Les informamos que este próximo 5 de enero ya no recibiremos sus cartitas en globos porque contaminan”.
Así, invitaron a los usuarios a utilizar el hashtag #ReyesMagosSinGlobos para apoyar la campaña y pidieron a los pequeños que dejaran sus cartas debajo del árbol de Navidad, dentro de un zapato o que las mandaran por correo.
El objetivo no era otro más que evitar que los globos acabaran en ríos, mares y acuíferos, contaminando estos lugares y terminaran en el interior de muchos animales provocándoles la muerte. Tal es así la situación, que la revista National Geographic asegura en un reportaje que ocho millones de toneladas de plástico acaban en el mar cada año. La ONU calcula que para 2050 habrá menos animales marinos que plásticos en los océanos si no se toman las medidas oportunas para frenar la tendencia.
Miguel Rivas, coordinador de la campaña de océanos de Greenpeace México, contó a Verne que “debemos dejar de producir todo tipo de artículos de plástico de un solo uso. No hay sistema que aguante” e indicó que hay que retirar totalmente las bolsas, cubiertos de plásticos, desechables y en paquetes de alimentos.
Balloons Blow, una ONG dirigida a difundir el daño que provocan los globos en el medio ambiente, ha apuntado que, aunque exploten en miles de trozos, estos caen en la tierra, en los océanos y los mares y son tragados por animales, a los que provocan bloqueos instestinales e incluso la muerte.